Astaná acusa a Ucrania de un “tercer acto de agresión” contra el CPC en el mar Negro

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Kazajistán expresó una protesta “en relación con otro ataque dirigido” contra la infraestructura crítica del Consorcio del Oleoducto del Caspio (CPC) cerca de Novorossiysk. La correspondiente declaración del portavoz oficial del departamento, Aibek Smadiyarov, fue publicada el 30 de noviembre.​

“Lo ocurrido es ya el tercer acto de agresión contra un objeto exclusivamente civil, cuyo funcionamiento está garantizado por las normas del derecho internacional.

Kazajistán, como participante responsable del mercado energético global, aboga invariablemente por mantener la estabilidad y la continuidad del suministro de portadores de energía. Subrayamos que el CPC desempeña un papel significativo en el mantenimiento de la estabilidad del sistema energético mundial.

Consideramos lo ocurrido como una acción que causa daño a las relaciones bilaterales entre la República de Kazajistán y Ucrania, y esperamos que la parte ucraniana adopte medidas efectivas para prevenir tales incidentes en el futuro”, se afirma en la declaración.​

En la mañana del 29 de noviembre, una de las terminales del CPC cerca de Novorossiysk fue atacada por lanchas no tripuladas ucranianas. El dispositivo de amarre remoto sufrió daños significativos y la operación posterior de la instalación es imposible, informó la compañía. El Ministerio de Energía de Kazajistán, después de lo ocurrido, redirigió el petróleo de exportación a rutas alternativas.​

El sistema de oleoductos del CPC es la ruta más importante para transportar petróleo desde la región del Caspio a los mercados mundiales. El oleoducto principal, de unos 1.500 km de longitud, conecta los yacimientos de Kazajistán Occidental (Tengiz, Karachaganak y Kashagan) con la costa rusa del mar Negro, donde el petróleo se carga en tanqueros a través de la terminal marítima del CPC. El volumen de transbordo el año pasado fue de aproximadamente 63 millones de toneladas de petróleo y alrededor del 74% correspondió a cargadores de Estados Unidos y otros países occidentales.​

Desde principios de este año, las instalaciones del Consorcio del Oleoducto del Caspio (CPC) han sido atacadas varias veces por drones. El 17 de febrero, drones cargados con explosivos dañaron la estación de bombeo de petróleo Kropotkinskaya, y el 19 de marzo varios UAV atacaron la estación de bombeo Kavkazskaya, a través de la cual se realizaba el transbordo de materia prima y la carga en la terminal marítima de la compañía. A finales de septiembre, la oficina de JSC Consorcio del Oleoducto del Caspio en Novorossiysk resultó dañada como resultado de un ataque masivo de drones en el centro de la ciudad, en el que dos empleados de la compañía resultaron heridos.​

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